Inexplicablemente, los niños del Perú llevan 19 meses con las escuelas cerradas y clases virtuales, cuando el plan de vacunación avanza a buen ritmo y los casos de contagios y fallecidos bajaron considerablemente.
En tal sentido, diferentes estudios y profesionales de organismos internacionales, como la UNESCO y UNICEF, determinaron que los estudiantes que asisten a clases virtuales aprenden menos que los que lo hacen de manera presencial.
La ONU citó: «Interrumpir la instrucción en el aula puede tener graves repercusiones en la capacidad de aprendizaje de los estudiantes. Cuanto más tiempo dejen de asistir a la escuela los niños de las familias más pobres, menos probable es que regresen. Estos niños ya tienen casi cinco veces más probabilidades de no asistir a la escuela primaria que los niños de las familias más pudientes».
«Además, los cierres prolongados interrumpen servicios esenciales que prestan las escuelas, como la vacunación, la alimentación escolar, el apoyo a la salud mental y la orientación psicosocial», agregó UNICEF.
Y completó: «Asimismo, pueden generar estrés y ansiedad debido a la pérdida de la interacción con los compañeros y a la alteración de las rutinas».
Por su parte, la OEI (Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura) plantea que pasarán 11 años para recuperar el aprendizaje perdido en este tiempo de pandemia. Trascendiendo lo académico, las escuelas cerradas están afectando la capacidad de los niños peruanos de relacionarse, por la falta de contacto e interacción con otros niños y adultos.
Si bien en un principio el cierre de las instituciones educativas fue una decisión eficiente para frenar la propagación del virus en Perú, hoy las cifras avalan un regreso a clase.
Las cifras avalan un regreso a clases
De acuerdo con el Minsa 42% de los peruanos, mayores de 12 años, han sido vacunados con la primera y segunda dosis, un gran avance. También señaló que la cantidad de hospitalizaciones y fallecimientos son los más bajos que se han registrado desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020.
Estos números oficiales son un claro ejemplo de que el Gobierno de Pedro Castillo está en condiciones de volver a la prespecialidad en las escuelas. Pero pareciera que falta voluntad política para hacerlo.
Ante esto, «Volvamos a Clases Perú», un colectivo de madres y padres de familia de colegios públicos y privados, que surgió́ en las redes sociales al notar el deterioro en el aprendizaje y la salud mental de sus hijos, le exigió al Gobierno medidas resolutivas.
Según “Volvamos a Clases Perú” 705.000 niños y niñas y adolescentes han interrumpido su educación o están en riesgo de hacerlo debido al cierre de las escuelas, y uno de cada tres niños no comprende lo que lee. También compartieron la impactante cifra del aumento de los trastornos de salud mental (50%) como consecuencia del confinamiento.
«Exhortamos al Gobierno a garantizar un retorno seguro al 100% de los estudiantes de Perú a más tardar en marzo de 2022», sentenció el colectivo de madres y padres.
Si bien los ministros Hernando Cevallos (Salud) y Juan Cadillo (Educación) hablaron sobre la importancia de la educación, ambos descartaron la vuelta a la presencialidad. Pero la realidad que ellos no ven es que no todas las familias tienen los medios económicos para comprar un teléfono móvil, una tablet o una computadora de escritorio, y además contratar el servicio de internet, para que sus hijos se eduquen.
Ni siquiera alcanza la iniciativa del presidente Pedro Castillo de entregar un subsidio de 200 soles con la finalidad de respaldar económicamente a los hogares que se vieron perjudicados por no tener los medios para continuar con la enseñanza virtual.
«En Perú apenas el 7% de los grupos más vulnerables tienen una computadora. Mientras que sí la tienen el 94% de los estudiantes de contextos favorecidos», dijo el BID.
«Además tan solo el 14% de los más pobres -según el mismo informe- tiene acceso a internet en el hogar», sentenció para dejar claro que en Perú es necesario la vuelta a los colegios de manera presencial.